Unos 250 jóvenes participaron de la festividad que conmemora el inicio de la Iglesia. La convocatoria superó las expectativas de los organizadores y fue la mejor apertura para la Misión Joven.
Alegría, fraternidad y también devoción se vivieron en la Fiesta de Pentecostés que organizó el Obispado de Valdivia. Todo comenzó con la Misa de Pentecostés celebrada en la Catedral, en la cual se presentó la Cruz Misionera, entregada en la última Asamblea de la Conferencia Episcopal, y que comenzará a recorrer toda la diócesis.
La Eucaristía sirvió de punto de partida para el envío de la Misión Ambiental, con lo que las distintas instituciones que participarán en esta iniciativa recogieron un cirio, con el que presidirán sus reuniones.
Tras la Misa el Obispo de Valdivia, Monseñor Ignacio Ducasse, entregó la Cruz Misionera a los jóvenes, que la llevaron en una alegre procesión hasta el Instituto Salesiano donde se realizó la Vigilia. Lejos de ser un impedimento la lluvia que caía sobre la noche valdiviana animó aún más el recorrido.
En el gimnasio del Instituto Salesiano el grupo de animación salesiano alegró a los chicos presentes con cantos y bailes, para después dar paso a los momentos de reflexión acompañados de videos.
Fuente: Obispado de Valdivia